En momentos de estrés o de ansiedad, una de las claves para sentirse mejor es acercarse a un lugar tranquilo, donde se respire paz y armonía: Respirar hondo, cerrar los ojos durante unos minutos y contemplar sin pensar en nada, con la mente en blanco: un amanecer, una puesta de sol, el mar en calma, el cielo estrellado o la luna si es de nochem un estanque con cisnes, gansos y patos como los de la fotografía. Si tenemos algo así a nuestro alcance en momentos de tensión, es un auténtico privilegio. En caso contrario, se puede intentar visualizar cualquiera de estos paisajes tratanto de vernos dentro del escenario para beneficiarnos de todo lo positivo que pueda aportarnos.
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